Dos exculpados hace nueve meses por una prueba de ADN siguen en prisión

T. B.,  -  Madrid
EL PAÍS  -  Sociedad - 01-03-1998

En junio de 1997 los avances genéticos permitieron demostrar la inocencia de dos ciudadanos marroquíes que llevaban seis años encarcelados en la prisión de Can Brians (Barcelona) por varias violaciones. Nueve meses después de descubrirse el error judicial, ambos siguen en prisión. El fiscal jefe de Cataluña, José María Mena, no cree que haya que revisar su caso. Uno de los encarcelados, Abderrazak Mounib, comenzó el viernes su quinta huelga de hambre. Los hechos se remontan a octubre de 1991, cuando en varias comarcas catalanas se produjo una oleada de asaltos a parejas que habían buscado con sus coches la intimidad de lugares apartados. El 11 de noviembre la policía detuvo en la habitación de su pensión de Terrassa a Ahmed Toummouch, emigrante marroquí de 40 años y albañil de profesión. Dos días después fue detenido Abderrazak Mounib, vendedor ambulante de 39 años. La investigación estuvo plagada de irregularidades. Por ejemplo: Toummouch fue visto esposado por las víctimas antes de ser sometido a la rueda de identificación y la foto de Mounib se publicó en varios periódicos antes de que compareciera ante sus supuestas víctimas. En 1995 se reprodujo la ola de ataques, por la cual se terminó deteniendo en Manresa a Antonio García Carbonell, de etnia gitana, al que entre otras cosas se le ocuparon varios objetos robados a las víctimas de los asaltos. Lo más sorprendente: el individuo detenido era una fotocopia de Ahmed Toummouch. Las pruebas de ADN de los restos de semen de las prendas de una de las mujeres violadas en 1991 revelaron la culpabilidad de García Carbonell y la inocencia de los marroquíes. La condena fue revocada. Pero aún tenían pendientes otras tres sentencias por violación. La cuestión es que en esos otros casos no hay rastros de semen que analizar.